sábado, 20 de abril de 2013

LA HISTORIA CONTADA (poema)


LA HISTORIA CONTADA


I

 

Cuando todo empezó,

fue hermosamente bello.

Dos extraños unidos

por un destino común,

caminando uno al lado del otro,

sin esperar mucho,

sin desear nada, divirtiéndose

siendo ellos mismos.


Avanzaba el camino.

Las confidencias a media voz,

las charlas a altas hora de la mañana,

los sábados donde el trabajo

se confundía con vivir la vida,

con disfrutar del momento.

 

Poco a poco todo

se fue confundiendo.

¿Quién era ella?

 ¿Quién era él?

 ¿Dónde les llevaban las miradas?

 ¿Dónde aquellos roces

perdidos a plena luz del día?

 

Algo empezaba a arder

en una inmensa candela

de sentimientos encontrados.

 El cariño no era amor.

El abrazo no era deseo.

La caricia no era lujuria.

La mano no llegaba al borde

ni se precipitaba nunca al vacío.

 

Empezamos a llenar

los huecos de nuestra vida.

Tu formabas parte de mí.

Yo era un extensión de tu ser.

Creábamos un único individuo

divisible la mayor parte del día.

 

La existencia empezaba

a tener sentido para nosotros.

Sólo sobraban dos entes

en una ecuación que jamás

sería perfecta sin ellos,

que no tenía sentido

sino era a su lado.

 

II

 

El verbo soñar se quedó

pequeño para nosotros.

Necesitábamos conjugar unidos,

fusionando nuestras palabras,

jugando a la poseía,

luchando por ese querer sin querer.

 

El presente de indicativo

era irreprochablemente irreal.

El futuro imperfecto

no nos importaba.

El pretérito pluscuamperfecto

de nuestro ser,… nos confundía.

 

Se nos atragantaron

errar, satisfacer, elegir

a la hora de aglutinar

los más adecuadamente

posible nuestro mundo a cuatro.

 

Quisimos aislar nuestras

ideologías estigmatizadas para poder vivir

la vida subversiva del ayer.

Mas no hay mundo donde

el verbo desear se pueda acallar

después de prender la flama

que la hace estallar más allá del

abismo incoherente de la pasión.

 

III

 

Llegó el instante de luchar

por la coherencia.

Te mostré que sumar

sólo significaba restar.

La carencia de eso todo,

la amarga tramitación de esta

ecuación dispar de sentimientos,

tenía que acabar eliminando

 a dos factores muy importantes.

 

Yo era de letras.

No podía eliminar mi factor

ni deseaba que tu lo hicieras con el tuyo.

¿Dividir? No era práctico.

¿Multiplicar? Estábamos locos

sólo con pensar en ello.

 

La matemática emocional

no era nuestro fuerte.

La matemática distribucional

nos asustaba en lo más hondo.

La matemática distorsional

nos avergonzaba de forma visceral.

 

Ni vectores, ni iguales,

ni barras invertidas, ni aquellas

que parecían cruces,

ni los asteriscos conversos

era el subterfugio de nuestras vidas,…

Moríamos por un expediente lógico

 que nuestra razón ilógica

no nos permitía entender.

 

IV

 

Delirare”.

Tus labios, los míos,…

ya no hubo sensatez.

Desviados para siempre

de los surco rectos del amanecer.

Tus manos segaban mi silueta

desdibujada entre los lienzos.

No había boca, ni pezón, ni humedad oculta.

Rubor enfermizo me contagió

 hasta volverse fuego

acuoso en mi paño blanco.

 

Tus gemidos acallados

hicieron tambalear mi cordura.

No puedo evitarte amante

oscuro que vienes a mí.

Ángel del deseo,

deja de revolotear por mi cuerpo

y atiende a enmudecer mis ganas.

 

V

 

Busque tu sombra

noche tras noche.

Alcé mi sediento

apetito de hembra

 hasta convertirlo

en ardor sombrío.

Me caí en tu pecho.

Me disipé en tus labios.

Fui dejándome arrastrar

hasta los infiernos.

Me fui perdiendo

poco a poco

en lo mas profundo de tu pecho.

 

VI

 

En una mañana que el alba

no nos despertó en la misma cama,

algo oscuro empezó a nacer dentro de ti.

 

¡Odie en lo que te habías convertido!

El día en que la bandera de los celos

fue tu estandarte en tu buque pirata,

mi furia salvaje empezó

a crecer muy dentro de mi.

Quería aborrecerte por convertirme

en tu esclava de noche,

una persona sin vida,

sin presente,

sin pasado,

sin futuro.

 

Buscabas en mí lo que no podías darme

 obligándome a aceptar mentiras

con tal de saciar tu sed

de niño raramente consentido.

 

VII

 

Se rompió.

¡Ya no quedaba nada!

Vagamos a la deriva

durante meses, tu al timón,

yo en el calabozo más

profundo de tu océano de miedos.

Necesitaba salvarme,

necesitaba coger aire,

apretar mi corazón contra

el cielo que no podía ver,

despertar a la realidad

ásperamente atesorada.

 

VIII

 

Con heridas gravemente

hondas escapé, diciéndome

a mí misma que podría

sobrevivir a tu ausencia.

 

Hoy que la sangre baña de nuevo

el suelo que compartíamos a solas,

no dejo de gritar tu nombre.

 

Busco tu barco sin alma

en un mar de lágrimas

que dejaste tras de ti.

No hay bandera,

ni capitán que gobierne el navío,

ni algo parecido al amor,

ni algo semejante a los celos.

 

Un mundo sin ti,

una historia contada,

un universo de oscuridad.

 

Dejar el pasado hace daño.

Hallarse el presente me lastima.

Pensar en el futuro punza mi ser.

Vivir sin ti,… dolerá para siempre.

jueves, 18 de abril de 2013

DELIRIOS FEBRILES (poema)


DELIRIOS FEBRILES

 

Me quemaba,

ardía bien hondo,

tan adentro, que podía

 sentir como me mataba.

Mire a un lado y allí

estabas tú tan reposado,

 viendo morir mi cuerpo

entre las sombras.

Que amargo querer el tuyo,

que ni de la muerte

quieres salvarme,

que ni me lanzas

tu mano a la ayuda,

que ni viniste a buscarme

cuando estaba desnuda.

 

Se me carbonizaba la boca,

la frente, ese lugar dónde

 se esconde tu esencia pocas

veces cuando oniro no te mira.

 

Jugaba la guadaña en pecho,

con el latido de mi corazón.

Podía recordar el dolor ácido,

la angustia amarga,

el agotamiento duro de la lucha.

 

Da la última estocada,…

¡No quiero transigir más a los delirios!

Me punza el alma,

la esencia desgarrada no me deja vivir,

el rumor de la vida es un eco en mi mundo.

 

Pon punto final a mi pesadumbre.

¡Tu sabes muy bien como poner fin!

miércoles, 17 de abril de 2013

TU NOMBRE (poema)


TU NOMBRE


Amaneceres sin sol se ciernen

a mi como una segunda piel,

llevando mi cabeza a ese borde,

donde la cordura cree morirse.

 

Ningún consuelo quedará

ya para mi alma maltrecha,…

ningún desahogo, sólo la herida.

 

De nada sirven las palabras caducas;

poco valen ya las caricias olvidadas,

ni los besos inexistentes,

ni los labios relegados,

ni tu boca ausente.

 

Recodar es sólo aferrarse a ti,

a tu ser y seguir muriendo después

de muerto en cada uno de tus silencios.

 

Entre cielo, entre la tierra sólo yo,

soledad, delirio, angustia de saberte

e ignorante,… es lo que me queda.

 

Unirme entre locuras quimeras,

a la tuya la primera,

para una voluntad marcada a fuego,

por una alma que ni lloró de pena.

 

 

martes, 16 de abril de 2013

LA ENTREVISTA DEFINITIVA (relato)


 

 

La tercera entrevista y estaba muy nerviosa. Después de la primera selección, los psicotécnicos, los juegos psicológicos, juegos de palabras y demás,… había llegado a la última entrevista de trabajo. Tres candidatos y sólo un puesto de trabajo. Estaba tan, tan y tan alterada que todo me salía mal: se me habían roto las medias al ponérmelas, se me había manchado la blusa al lavarme los dientes, no tenía ropa interior mayor que un tanga y encima,… tenía una carga sexual muy latente. Mis antiguas compañeras de instituto me habían dicho siempre que se aliviaban sexualmente ante de cada examen acompañadas o en soledad. A mi no me había hecho falta nunca pero ahora,… me encantaría tener cinco minutos para descargar mi cuerpo sexualmente hablando.

 

Me puse una camisa blanca , una falda corta plisada de cuadros grises de varios tonos, ropa interior blanca (sujetador con aros y tanga) y, como se me habían roto las medias en plan leotardos, me tuve que poner medias con liguero. Cogí el bolso y salí con el coche en dirección a la entrevista. Era en las afueras de la ciudad en un bloque de oficinas enorme, de 50 pisos de alturas. Tenía la entrevista a las once en el piso número 48. Esperé que llegara uno de los ascensores. Abajo no había nadie esperando el ascensor. Era grande el ascensor y cuando entré sólo había un hombre al fondo del todo. Me subí y cuando llegó al segundo piso entró una avalancha de gente que me empujaron hasta el final de todo. Con el golpe de gente me empujaron y con tan mala suerte que fui a parar contra el hombre de el final del ascensor. Mi trasero chocó con su bragueta y le pedí perdón casi sin mirarle porque me daba un poco de vergüenza. El ascensor subía muy lentamente. Mi falda estaba pegada a su pantalón por el exceso de gente. Su miembro empezó a crecer ante aquella situación tan inesperada y yo, al sentir como se excitaba, empecé a humedecer mi tanga de manera excesiva. Mis pezones se pusieron erectos, muy duros por la excitación. El se dio cuenta y le gustó la situación tanto como a mí. Su mano se deslizó por mi cintura y me apretó más fuerte contra su pantalón para que sintiera la grandeza de su sexo a través del tacto escaso de la tela de nuestra ropa. Yo no me lo creía. Estaba tan excitada que me dejé llevar por la situación pese a que el ascensor fuera lleno. Él bajó su cremallera y yo introduje mi mano por su pantalón para sentir su erección. Dejé su miembro al descubierto y él, ladeo mi tanga, y con fuerza pero disimuladamente, me penetró con fuerza. Estaba tan húmedo que entró enterita en mí y tuve que contener mi grito de placer al sentir su inmensa polla bien adentro. Se movía con mucha delicadeza y fuerza a la vez. Intentábamos disimular como nos dábamos placer pero era difícil controlar los gemidos que empezaban a ser incontrolables. La gente no salía del ascensor y yo necesitaba inclinarme un poco más para que me penetrara con más fuerza, para poder gritar con fuerza de placer libremente, para poder sentir sus manos en mis pechos, sus dedos en mi boca para poder lamerlos, para poder morderlos. Por suerte todo el mundo se bajó en el piso treinta y yo me incliné para sentirle más, más, más adentro y sentir el golpeo fuerte de su cadera en mi trasero. Empezamos a gemir con todo la pasión contenida que teníamos y nos dejamos llevar por gritos contenidos de deseo. Llegamos al piso 47 y nos serenamos ambos. Yo me recoloqué todo y sin mirar hacia atrás, salí en el ascensor en el piso 48. El siguió hacia arriba.

 

La entrevista fue genial porque me había relajado completamente con aquel polvo fugaz y salvaje en el ascensor. Me contrataron y dos meses después, cuando iba al parking a buscar al coche, me encontré con mi amante del ascensor. Esa vez fue igual de salvaje y fugaz, contra un pilar del parking y desde entonces,… seguimos disfrutando del sexo ocasional, intenso, ardiente, sin palabras, sin problemas y con mucha pasión. ¡Ya tengo ganas de que nos veamos mañana!

 

 

 

EDUCAR NO ES UNA TAREA QUE PUEDA HACER TODO EL MUNDO. ADMITIR UN ERROR,… SI


 

¿Qué es el nazismo? Según Wiki (http://es.wikipedia.org/wiki/Nazismo) el Nazismo es la contracción de la palabra alemana Nationalsozialismus, que significa nacionalsocialismo, y hace referencia a todo lo relacionado con la ideología y el régimen que gobernó Alemania de 1933 a 1945 con la llegada al poder del Partido Nacionalsocialista Alemán de los Trabajadores de Adolf Hitler (NSDAP, Nationalsozialistische Deutsche Arbeiterpartei), el autoproclamado Tercer Reich y Austria a partir de la Anschluss, así como los demás territorios que lo conformaron (Sudetes, Memel, Danzig y otras tierras en Polonia, Francia, Checoslovaquia, Hungría, Holanda, Dinamarca y Noruega). La Alemania de este período se conoce como la Alemania nazi.

El término "Nazi" deriva de las primeras dos sílabas del nombre oficial del partido: Nationalsozialistische Deutsche Arbeiterpartei o "NSDAP". Los miembros del partido se identificaban a sí mismos generalmente como "Nationalsozialisten" (Nacional socialistas) y solo raramente como "nazis". El origen y uso de "nazi" es similar al de "Sozi", palabra del lenguaje diario para designar a los miembros del Sozialdemokratische Partei Deutschlands (Partido Socialdemócrata de Alemania). En 1933, cuando Hitler asumió poder en el gobierno alemán, el uso del término disminuyó en Alemania, aunque en Austria sus oponentes lo continuaron usando con una connotación despectiva. A partir de eso, el término ha adquirido una connotación crecientemente peyorativa.

 

¿Qué significa peyorativo? Según Wiki (http://es.wikipedia.org/wiki/Peyorativo) Peyorativo es el uso del lenguaje con una finalidad negativa para lo que se designa.

Es un recurso muy utilizado el etiquetar negativamente al rival o enemigo con un término despectivo, como primera forma de lucha contra él.

 

¿Qué son los escarches? Según Wiki (http://es.wikipedia.org/wiki/Escrache) Escrache es el nombre dado en Argentina, Uruguay y España a un tipo de manifestación pacífica en la que un grupo de activistas de Derechos Humanos se dirige al domicilio o lugar de trabajo de alguien a quien se quiere denunciar. Se trata de un método de protesta basado en la acción directa que tiene como fin que los reclamos se hagan conocidos a la opinión pública.

La palabra nació en su uso político en 1995 en Argentina, utilizada por la agrupación de derechos humanos HIJOS para denunciar a los genocidas del proceso liberados por el indulto concedido por Carlos Menem.

En Chile estas acciones son conocidas como funa. La versión peruana, con una connotación más simbólica, se llamó roche y sus activistas firmaban como "El roche".

A partir de marzo del 2013 este término está siendo empleado -repentina y masivamente- en España, por los medios de comunicación, para definir las protestas de acción directa de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca.

 

¿Qué es un ministro? Según Wiki (http://es.wikipedia.org/wiki/Ministro) un ministro (latín: minister, 'servidor, subordinado, mediador'), es un político que dirige un ministerio o un departamento (e.j. educación, finanzas, salud, Estado, guerra, etc.), que pertenece al gabinete de gobierno, y son dirigidos normalmente por un primer ministro o un presidente.

 

Yo he tardado en buscar estos términos en la red y leerlos poco mas de diez minutos. De comprenderlos, por las explicaciones tan bien descritas, menos. Sin embargo hay una pregunta que me invade profundamente y es la siguiente: Si un ministro tiene que ser un mediador, si peyorativo es una forma negativa para etiquetar a un rival o enemigo, si los escarches son gente con manifestaciones pacificas, si el nazismo es una horrible fase de la historia no sólo de Alemania,… ¿Por qué una ministra del gobierno actual español que tendría que poner paños curativos en las heridas, trata de hurgas mas  profundamente en las llagas para  causar mas dolor sobre un pueblo herido de muerte como es el pueblo español? ¿Se ha convertido un pueblo con sus protestas en el enemigo del propio país? ¿Son los rivales a los que hay que tener? ¿Quién es el rival más débil? ¿El que ataca sin fundamento, sin educación y sin información correcta o el que nunca se consideró rival sino protesta pacífica?

 

Se que el ser humano tiene una parte muy grande de animal (racional pero animal a fin de cuentas) en su existencia pero no la convirtamos en la única parte que domine nuestra vida y menos que nada, nuestra mente y nuestras palabras. (Los rebuznos suelen ser graciosos cuando tienen un sentido pero si se lanzan por el mero hecho de rebuznar, se convierten en gritos ensordecedores sin sentido).

 

MORALEJA: Cuesta muy poco estar informado y alguien que forma parte de un gobierno, debería estar mínimamente informado, simplemente, para no acabar quedando como un verdadero asno.

 

UN DÍA FUIMOS SÓLO UNO (poema)


UN DÍA FUIMOS SÓLO UNO

 

 

Un día fuimos sólo uno.

Conjugábamos verbos a solas y el sol,

que siempre se marchitaba

ante nosotros, único,

nos daba las buenas noches.

Las lunas más bellas brillaron.

No había nunca un cielo

azabache sobre tú y yo.

¡Fue bonito! No había

nada pluscuamperfecto.

Todo era claro,

en presente de indicativo.

 

Hubo días que no querías conjugar.

No existían los verbos,

sólo vivía el sujeto,

uno directo que hacía

daño hasta sentirlo,

que siempre acababa

con un perdóname tardío.

 

Al final ya no había un nosotros.

¡Sólo conjugabas en futuro!

Un futuro dónde mi nombre no tenía cabida.

 

La noche oscureció para ese uno.

La luz bella en un pasado,

dejó visible todos los lugares

negros de nuestra existencia humana.

 

No quedaba amor.

No había dulzura.

No se podía perdonar en infinitivo.

 

¡Dejé de conjugar a solas

verbos que sin ti,

ya no tenían sentido!

 

Renuncié a hablar, simplemente.

Las palabras perdieron su fuerza.

 

Un día fuimos sólo uno.

¡Lejos, muy lejos, quedó ya ese día!