domingo, 23 de octubre de 2016

QUE SE ESCONDE EN LA MANO IZQUIERDA


ENTRADA Nº: 900

 

021/150


 

Hubo una vez un país donde había dos mundos muy definidos. Era como vivir en un mundo bicolor, pero no blanco y negro, sino rojo y azul. El blanco y negro ya lo había sido en una etapa anterior a esta. Cuarenta años viviendo en un mundo en blanco y negro. Imaginad lo felices que libertad y que felicidad más grande hubo cuando empezaron a inundar los colores en la vida de personas grises. ¡Fue alucinante! Se había acabado el racionamiento, la censura, el silencio. Y había llegado una nueva vida para todos.

 

El azul y el rojo ilumino nuestro cielo y subsistimos durante años y años y años con una “ilusión” casi perfecta. Comíamos bien, bebíamos bien, vivíamos bien. El fútbol era gratis y los toros también. La televisión creció y creció. Había canales para todos los públicos y todo completamente a nuestro alcance. Fue una gran época en la que todo fue “confianza ciega” pues aquello que nos llegó vino envuelto en algo que denominaron “poder para el pueblo”.  Como votábamos, como los elegíamos en las urnas, como se turnaban incluso en turnos de mandato.

 

Todos sabíamos que nadie se hace rico de forma legal. Así que todos los que gobernaban y luego, tras cuatro años (como mínimo) se marchaban cobrando una pensión de por vida por tan sólo cuatro años de “trabajo”, no se iban orgullosos sino con los bolsillos atestados de dinero de los ciudadanos, con millones y millones de pesetas (hoy de euros) de los que, se suponía, que tenían el poder: se quedaron con la fortuna del pueblo.

 

Mientras hubo pasta, “café para todos”, hicimos la vista gorda. Pero llego un agujero en el que estuvo implicado hasta el más “pintado” de rojo y azul, hasta el más “coronado” y los que les bebían los vientos bajo su manto protector.

 

Nos revelamos (no nos queda otra manera de hacerlo). No teníamos, nada, nos habían quitado hasta los servicios sanitarios, hasta la educación gratuita de calidad. No teníamos ni para comer. Estábamos peor que cuando el mundo era en blanco y negro pues en ese periodo de cuatro décadas, todos al menos, teníamos lo mínimo. Pero ahora no. ¡¡¡NADA!!! No había nada.

 

Los casos de corrupción florecieron como setas en un bosque muy fructífero. Empezaron a florecer otras fuerzas políticas de otros colores: naranjas, verdes, moradas,… Se abrió un mundo multicolor que, sin lugar a dudas, no ofrecía lo que le pueblo necesitaba: honestidad, respeto, sinceridad y lo más importante… ¡¡¡QUE DEVOLVIERAN LO ROBADO!!!

 

Entramos en una pugna por quien tendría el poder. Hubo unas primeras votaciones y unas segundas. A punto de abocar a todo un país a unas terceras elecciones… ¿Sabéis que pasó? Los rojos CEDIERON ante el poder de los azules. Se bajaron sus pantalones de carcamales inseguros (en principio por el bien de los ciudadanos) y TIRARON LA TOALLA pese a que en las últimas elecciones habían recibido 5,4 millones de votos por sus ideales los tiraban por la borda para dejar “GOBERNAR” a sus opositores. ¿Por qué? Pues por el bien de los ciudadanos. ¡¡¡QUE BUENOS SON!!! Y nosotros DUDANDO de sus intenciones. ¡¡¡QUE MALOS SOMOS!!! ¡¡¡QUE MAL PENSADOS!!! Todo por nosotros. Es decir, tras los casos de corrupción de unos y de otros, todo lo hacen por nosotros y no por guardar las espaldas de los que esperan ser juzgados ni los que van a ser imputados. Lo hacen… ¡¡¡POR EL PUEBLO!!!

 

Alguien dijo alguna vez. No perdáis nunca la vista de las dos manos de una persona y menos de las de un mago. Mientras os distrae con sus trucos en la DERECHA, lo que oculta está en su mano IZQUIERDA.

 

Así que tras una HUMILLACIÓN más que publica de bajada de los pantalones de los ROJOS, sin lugar a dudas hay una gran, gran, gran TRAMA para ocultar MALDADES MAYORES.

 

Aunque solo estoy narrando una fábula inventada. ¿Verdad? Cualquier parecido con la realidad es sólo… pura cortesía literaria que he tomado para decorar este pequeño “cuento”.

 

MORALEJA: Todo buena historia, necesita de una buena moraleja como broche final: Gregorio Marañón, médico y escritor español (1887-1960) dijo:

 

“Vivir no es sólo existir,
sino existir y crear,
saber gozar y sufrir
y no dormir sin soñar.
Descansar, es empezar a morir”.

 

¡¡¡Bienvenidos a un país que se murió por no dejar de descansar!!!

 

domingo, 16 de octubre de 2016

QUIERO MORIR EN EL VIENTO (poema)


QUIERO MORIR EN EL VIENTO

020/150

 

 

Quiero morir en el viento,

perderme para siempre

entre las nubes,

acabar anulando por

fin todo este dolor.

 

Quiero morir en el aire,

flotando por encima de

la hipocresía más absoluta,

aleteando sobre las cabezas de

aquella muchedumbre

de asnos pegadas a pantallas,

pequeñas, medianas, grandes,

tratando de encontrar un sentido

más que incomprensible

para sus vidas tras

un mar de emociones fingidas.

 

Quiero morir en el cielo,

para estar mucho

más cerca de ti que el resto.

Nunca entendí la tierra,

ni ese rito escéptico

de acabar sepultado

para acceder a lo más alto.

¡No deseo que me entierren!

Ni que coloquen mis restos

en un tablero de ajedrez simiesco

donde las fichas no se volverán

a mover nunca jamás.

 

Quiero morir en lo más alto,

acortando mi camino para ir arriba.

Da igual si hay alguien

me espera o si tengo

que enfrentarme sola

a lo que venga.

Deseo morir en las alturas,

donde el oxigeno ya no exista,

donde la vida no sea posible,

donde la muerte es

la única opción posible.

 

In memoriam FVC

 

sábado, 15 de octubre de 2016

TU CARA ME SUENA V



019/150

¡ME ENCANTA EL PROGRAMA TU CARA ME SUENA! Muchas personas piensan que es un programa de segundas oportunidades. Yo sinceramente siento que es un programa de nuevas oportunidades. “¿Pero eso no es lo mismo?” Pues no. Aunque parezca lo mismo no lo es. Cuando alguien te da una segunda oportunidad es porque algo no funciono bien o no se hizo bien esa primera vez. ¿En serio alguien puede pensar que cualquiera de los concursantes de Tu Cara Me Suena V no aprovechó su primera oportunidad? ¿En serio? Sinceramente no sabéis lo que significa tener una oportunidad en este país. Por MUY BUENO O BUENA QUE SEAS, a todas las personas que se les da una oportunidad aquí, en Spain, es para aprovechar su fulgor momentáneo de estrella. Ellos y ellas siguen siendo increíbles, sin embargo no se les sabe apreciar esa calidad que cuesta tanto tener.

Ahora bien, una nueva oportunidad es para demostrar que el talento, no es flor de un día como nos quieren hacer creer. ¿En que mundo uno pasa de ser genial o increíble un día y ser patético al siguiente? ¡Es imposible! Simplemente es que en este país, será por eso de SPAIN IS DIFFERENT que hoy tienes un diamante en bruto cargado de aptitudes para ser un gran producto, pero como necesitamos novedades, lo “antiguo” que no lo es, pasa a un segundo plano. ¡HORRIBLE!

Pero que os voy a contar yo que vosotros no sepáis. Aquí solo se apuesta por los caballos ganadores, por aquellos que generan dinero e ingreso, aquellos a los que uno puede exprimir hasta la última gota. Cuando ya no queda nada de ellos, es cuando ya no son válidos (según la mentalidad Marca España).

Más yo no pierdo la fe. Siento que alguna vez, pese a que Bob Dylan haya sido premiado con el Novel de Literatura por sus letras, se nos de una oportunidad a aquellos que por falta de recursos económicos, lanzamos nuestro talento a una plataforma gratuita pues no tenemos otra forma de demostrar cuanto valemos.

En fin, que por mucho que me guste Bob Dylan, el premio Novel de Literatura no le correspondía según mi criterio. Para mí debería de haber sido otorgado a Philip Roth, o a Patty Smith, o a Charles Simic, o a Diane di Prima (poetas y escritores con un gran valor literario que invito a descubrir). Sin embargo, una vez más, la incongruencia vuelve a hacerse participe en este mundo donde hasta los premios, por desgracia, siguen unas directrices más políticas, más de amiguismo, más de oportunismo o de decisión estrambótica sin sentido, que más un premio a un gran valor literario que tanto cuesta llegar a trasmitir en un poema o en una novela.

 

MORALEJA: Yo me he presentado a varios concursos literarios (eso no es algo que os haya descubierto ahora sino que ya lo hablamos en uno de los programas de Luís Bermejo: http://luisbermejo.com/blog/165-paula-y-luis/). He ganado algunos pero siempre que me presentaba a uno tenía claro una idea que inculcó un profesor muy apreciado por mí de Literatura: “Cuando uno gana un premio es gracias a la opinión de un jurado. Si hubiera otro jurado, el ganador, no olvides, que será otro”. Es por eso que TU CARA ME SUENA V es un programa de nuevas oportunidades y espero que ese “JURADO” que sin lugar a dudas no es ni Latre, ni Llatzer, ni Lolita, ni Chenoa, sino todos aquellos que luego haremos que nuestras ESTRELLAS MUSICALES, LITERARIAS, ARTÍSTICAS y demás, no tengan que abandonar su país para acabar ganándose la vida haciendo lo que más le gusta y les hacen ser los mejores dentro de su categoría. ¡¡¡BRAVO POR LAS OPORTUNIDADES!!!

jueves, 6 de octubre de 2016

MIEDO (escrito)


 

018/150

El agua corría con virulencia por las calles. La calzada, las aceras, ya no existían. Todo lo que conocía como terreno seco se había convertido en un río improvisado que se encauzaba hacía la parte baja de la ciudad. Caminaba sin paraguas. Mis pantalones negros que calaron en apenas un minuto. Mi blusa se empapo un poco antes. La ropa interior se fue impregnando a la par. Mis tacones parecían pequeñas barcas submarinas que alternaban en el caminar, la parte aparentemente seca con el fondo de aquel arroyo que empezaba a hacerme resbalar levemente.

Nunca me asustó la lluvia. Me encantaba poder contemplarla desde mi coche, ya fuera conduciendo o desde un aparcamiento. Me deleitaba escuchar el golpeo apaciblemente delicioso contra el cristal de la ventana de mi habitación. Incluso mojarme nunca había sido un problema, pues me encantaba caminar bajo ella dejando que resbalara desde la parte alta de mi coronilla hasta mis tobillos sin prisa alguna. Cuando veía a la gente correr por las calles intentando evitar mojarse siempre me decía a mi mismo lo mismo: “¡Pobres insensatos! ¿Con creen que se duchan por las noches?”. Sin embargo, yo nunca corría. Supongo que si alguien se hubiera percatado de mi parsimonia, de mi placer simplemente por sentirme en unión con la naturaleza en aquel simple gesto de fundirse con el agua que caía del cielo, quizás también me hubieran considerada una insensata. Pero eso no me importaba.

Todo era perfecto. Sin prisa, sin estrés, sin tantos ruidos incómodos de la ciudad a mí alrededor, sólo el agua, chasquidos, salpicones, juego de percusión de aquellas lágrimas celestiales al chocar contra papeleras, coches, vitrinas, escaparates y demás mobiliario urbano. “¡Esto debe de ser la felicidad!” afirmé para mis adentros con una sensación de plenitud plena.

Mas un resplandor ilumino el cielo de norte a sur. Como si de un flash de una cámara se tratara. Cuando llegó el estruendoso eco que perseguía aquel fogonazo, mi cuerpo entero se quedó bloqueado por un instante. ¡Inmóvil de la cabeza a los pies! Luego, como si hubiera recibido la descarga de aquel relámpago, corrí como si me persiguiera una manada de ñués sin control. Poco me importaba ya ni la lluvia, pues algo había alterado por completo mi calma. Otro resplandor en el cielo, la replica sonara mas rápida que la anterior. Mis zancadas eran precipitadas. Ya no caminaba, corría. Debía alejarme lo antes posible de allí. Mi corazón me azoraba. Todo mi cuerpo temblaba pero no de frío. Sentía pavor, un pánico terriblemente horrible que me subía por la espalda. Un tercer fogonazo explotó delante de mí, como una aparición inesperada. El rumor estrepitoso y punzante me hizo replegarme como un ovillo de lana en mitad de la nada. ¡TENÍA MIEDO! Y no podía hacer nada.